Hay una oportunidad para que México, Brasil y Colombia jueguen un papel, que es mostrarle a Maduro que tiene muy pocas opciones y que la opción de gobernar en una Corea del Norte en América del Sur no es una alternativa que ninguno de ellos va a tolerar, y que no le conviene, porque no va a poder gobernar sin acceso a los mercados. Debe ser una respuesta coordinada y regional que incluya a Estados Unidos y no necesariamente con sanciones o amenazas de sanciones económicas, [sino] incentivos legales que se les otorga a algunos individuos en el poder para que vean que tienen un futuro mejor en una transición democrática que aferrándose ciegamente a seguir órdenes de los que no tienen una alternativa.