Por el momento, supongo que se trató de una medida mayormente simbólica – aunque relevante en su campaña de reelección -, que sugiere que Trump seguiré siendo leal a sus amigos, cumplirá sus promesas y no aceptará la derrota. Pero en este momento, no hay evidencia alguna que indique un esfuerzo renovado de EE.UU. para intensificar su batalla contra Maduro ni hay indicación de una nueva estrategia o camino para terminar con su poder en Venezuela.