Una reciente publicación muestra una estrategia innovadora para evaluar la competencia de niños en lectura y matemáticas en varios países de Asia del Sur y África subsahariana. Los ciudadanos utilizan métodos rigurosos para evaluar por sí mismos las habilidades de los niños.
La nueva estrategia tiene la ventaja de poner el aprendizaje de los niños en primer plano y hacer participar a los ciudadanos en el funcionamiento de sus escuelas. El año pasado, las evaluaciones lideradas por ciudadanos cubrieron más de un millón de niños.