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La directora del Programa sobre Estado de derecho, Tamara Taraciuk Broner, conversó con Así las Cosas con Carlos Loret de Mola sobre los posibles escenarios post-electorales en Venezuela.
COMENTARIOS DE TARACIUK BRONER:
“Han pasado más de dos semanas de las elecciones y el régimen de Maduro no ha puesto sobre la mesa evidencias ni del supuesto ataque terrorista que demoró los resultados electorales ni de [su] supuesta victoria. Lo que han hecho fue recurrir al Tribunal Supremo de Justicia, que es un apéndice del Ejecutivo, para tratar de legitimar un resultado electoral que no tiene ningún sustento y va en contra de las encuestas de boca de urnas, de lo que vimos en las calles y principalmente, en contra de las actas electorales que obtuvo la oposición.”
“El régimen está intentando comprar tiempo y se lo están dando. La realidad es que hasta la fecha ni México ni Colombia ni Brasil, que tienen más cercanía y la posibilidad de hablar con Maduro, reconocieron los resultados oficiales. Lo que han hecho es referirse a la situación de Venezuela con algunos eufemismos. […] Lo que estamos viendo en Venezuela es una ola represiva brutal con 2.000 personas retenidas, más de 20 muertos, una cantidad de amenazas a opositores políticos y al pueblo para que no se exprese. Entonces no es solo pedir de buena fe que se respeten los derechos humanos, sino ir un paso más. Lo mismo con la cuestión electoral, no reconocieron a Maduro y pidieron copias de las actas. A esta altura, […] hay que llamar las cosas por su nombre y hablar del fraude electoral en Venezuela.”
“La solución a esto no pasa solo por las sanciones. La realidad es que el poder en Venezuela no es monolítico y lo que hay que hacer es ofrecer incentivos que son legales, aunque tal vez para mucho de nosotros sean moralmente desagradables, para que ciertas personas que están en el poder judicial, en el poder electoral, en las fuerzas armadas, que no están implicadas en crímenes contra humanidad, que [son] un grupo pequeño, [para que] puedan ver un futuro mejor en una transición democrática que aferrándose a las órdenes de los que no tienen salida.”
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