Considerando que la educación constituye un elemento central para reducir las desigualdades en la distribución de ingresos, superar las condiciones de pobreza y lograr una mayor equidad e integración social, varios países latinoamericanos han puesto en práctica programas de becas para garantizar la educación de los niños y jóvenes de los sectores más pobres.
En esta edición se seleccionan cinco iniciativas de este tipo implementadas en México, Brasil, Argentina y Chile, documentadas en un estudio realizado en 2005 por la investigadora de PREAL, Ana María De Andraca, para el Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (IIPE – UNESCO).
Algunas de ellas han sido concebidas como mecanismo de distribución de la renta y erradicación de la pobreza, como Progresa/Oportunidades en México y Bolsa Escola en Brasil, ambos reseñados en la edición Nº 13 de Mejores Prácticas y actualizados en este número. Otras están más orientadas a promover la permanencia de grupos específicos de estudiantes en el sistema escolar, como el Programa Nacional de Becas Estudiantiles en Argentina y los programas chilenos Beca Presidente de la República y Beca Liceo para Todos.