Tanto para garantizar una mejor calidad de la enseñanza como para incentivar el progreso de las competencias y prácticas profesionales, algunos países han implementado sistemas de evaluación y/o certificación docente a distintos niveles, desde los de graduación y registro definitivo de los maestros hasta los que permiten el reconocimiento de niveles de excelencia alcanzados. En este número se presentan experiencias de sistemas orientados principalmente a evaluar niveles de docencia avanzada. Esto se traduce generalmente en mejores salarios y oportunidades de promoción para quienes aprueban.